La reparación de cornisas es una de las actividades más demandadas a las empresas de Trabajos Verticales, pues al ser el medio auxiliar más rápido, soluciona en cuestión de horas el peligro del desprendimiento, de la manera más económica y menos molesta.
Cornisa deteriorada con peligro de desprendimiento
Detalle del estado de la cornisa antes de su demolición (observe se el estado de oxidación de las armaduras)
Las cornisas, al ser un elemento sobresaliente de la fachada y al encontrarse en muchas ocasiones a gran altura, suponen un gran riesgo para los peatones en caso de estar deterioradas o agrietadas. La demolición de las zonas defectuosas y elementos con peligro de desprendimiento, puede estar resuelta en cuestión de 2 ó 3 horas desde el momento del aviso y a menor coste que los bomberos, si llama a una empresa de Trabajos Verticales.
Demolición de cornisas con medios manuales y mecánicos
La reparación con morteros de última generación de baja retracción y de fraguado rápido, hacen posible, si la cantidad de metros lineales no es mucha, dejar terminado el trabajo en el mismo día.
Reparación de cornisa con mortero de alta resistencia y baja retractación
Si la cantidad de metros lineales es elevada y/o se encuentran repartidos por distintos sitios de la fachada, el trabajo requerirá de mas días, pero como es el medio auxiliar menos invasivo y una vez acabada la jornada laboral se retiran las cuerdas de la fachada hasta el día siguiente, las molestias son mínimas.
La suma de la rapidez y la carencia de alquiler de medios auxiliares, dan como resultado una gran ventaja económica a los Trabajos Verticales, difícilmente igualable.
Resultado de la reparación de una cornisa (a la izquierda de la Junta de dilatación) con Trabajos Verticales con total éxito
Si esta actuación la realizásemos con cualquier otro sistema de medios auxiliares: andamios, guindolas, plataformas elevadoras, etc. las desventajas son notables:
1º El tiempo de repuesta para eliminar el peligro se alarga muy considerablemente, creando una incertidumbre hasta su solución, que podría, en caso de no llegar a tiempo, ser nefasta.
2º Las molestias que suponen tener un andamio, o guindola todo el día y la noche delante de las ventanas y balcones son considerables, pues restan visibilidad, y luz, sin dejar de mencionar el peligro de acceso a las viviendas de los ladrones por las noches, o el peligro que tiene para los niños si se saltan a él desde las ventanas o se suben desde la calle.
3º Económicamente, el alquiler o amortización de estos equipos, suponen una partida muy elevada dentro del presupuesto de las empresas constructoras.
Esperamos que la información haya sido de su utilidad, muchas gracias.
Andaluza Vertical